De nuevo, susto

Parecía que todo estaba volviendo a la calma. Hacía semana y pico que esa sensación de vaiven se me había ido (cuando se sufre un temblor muy fuerte, el sentido del equilibrio queda algo tocado y se tiene la sensación de «ir en barco» todo el día). Teníamos réplicas pero estas ya iban a menos, más suaves y pausadas. Nos estábamos bien acostumbrando.

Ayer noche, pasadas las 11 y media, me disponía ir a la cama. Hideo se estaba lavando los dientes y Yuna dormía hacía un par de horas. Cogí mi teléfono, como voy haciendo cada noche desde el terremoto del pasado mes. Justo en la puerta del dormitorio éste empezó a sonar, la alarma de terremoto. Leí el mensaje (en japonés) y acerté a leer la prefectura de Miyagi. Fui corriendo al baño y avisé a Hideo. Y en ese momento empezó el temblor, suave pero yendo a más. Le dije a Hideo de ir a por la niña y me dijo que si. Era un temblor bastante fuerte aunque no como el del día 11 de marzo. Como resuena la casa… me decía Hideo. Y no veas como resonó hace unas semanitas !!

Largo e intenso (sin malinterpretaciones 😉 ) . Cuando acabó encendimos la televisión y ya estaban dando las noticias de posible tsunami. El terremoto(o super réplica), en el mar frente la prefectura de Miyagi, fue de una intensidad de 7.3 . Abrí el ordenador para llamar a mis padres. Como la vez pasada me imaginaba que la noticia volaría rápido. Un susto pero ya pasó y estamos bien, les dije. Menos mal que los avisé porque por Twitter leí que mientras en las noticias de Japón advertían de un tsunami de entre 50 cm a 1 m, las informaciones que se daban fuera de Japón eran de olas de varios metros. Ver para creer…

En las noticias algunos expertos decían que este terremoto fuera, posiblemente, el que se esperaba días después del gran terremoto del día 11. No entendían porque se había atrasado tanto pero que bueno, al final pasó.

Hace semana y pico le pasé a mi padre una página donde podemos ver todos los terremotos sufridos en Japón desde el pasaso 11 de marzo (Japan Quake Map). Para flipar en colores, más de 900 temblores.

Anteriormente no tenía miedo a los terremotos. Respeto si, un poco de yuyu, pero no miedo. Ahora me dan pánico. Ayer no hacía más que decirle a Hideo que menos mal que estaba él en casa.

Tenía ganas que todo acabara. Ahora más.